Plegaria contra los enemigos de Israel
Cántico. Salmo de Asaf.
1Dios mío, ¡no guardes silencio!
Dios mío, ¡no te quedes callado!
2Date cuenta de que tus enemigos rugen,
de que te desafían los que te aborrecen.
3Con astucia y en secreto conspiran contra tu pueblo;
se han juntado y hacen planes contra tus protegidos.
4Amenazantes dicen: «¡Vamos a destruir a Israel!
¡Borremos de la memoria el nombre de esa nación!»
5Conspiran con un solo propósito:
establecen alianzas para luchar en contra tuya
6los campamentos edomitas e ismaelitas,
y también los moabitas y los agarenos,
7los de Gebal, los de Amón y de Amalec,
los filisteos y los habitantes de Tiro.
8También los asirios se les han unido,
y brindan su apoyo a los descendientes de Lot.
9¡Haz con ellos lo que hiciste con Madián!
¡Trátalos como a Sísara y Jabín en el arroyo de Cisón!
10Ellos fueron derrotados en Endor,
y se convirtieron en estiércol para la tierra.
11Trata a sus capitanes y a todos sus príncipes
como trataste a Oreb y a Zeeb, a Zebaj y a Salmuná,
12esos que amenazantes decían:
«¡Vamos a adueñarnos de los pastizales de Dios!»
13Dios mío, ¡envuélvelos en un torbellino!
¡Arrástralos como hojas secas lanzadas al viento!
14¡Que ardan como el fuego que consume el monte!
¡Que ardan como las llamas que abrasan el bosque!
15¡Persíguelos con tu tempestad!
¡Hazlos temblar de miedo con tu torbellino!
16¡Llénales la cara de vergüenza,
para que busquen, Señor, tu nombre!
17¡Que sean avergonzados y turbados para siempre!
¡Que sean deshonrados, y perezcan!
18¡Que reconozcan que tu nombre es el Señor,
y que solo tú, Altísimo, estás sobre toda la tierra!